sábado, 28 de enero de 2012

Dicen y se contradicen...


Dicen que de los errores se aprende, que no hay mal que por bien no venga.Que las malas noticias nunca vienen solas; que después de la tormenta siempre sale el sol.
Se dice que los buenos amigos son para siempre, pero también, que nada es para siempre; que con el tiempo te das cuenta que solo cuatro o cinco están para todo, pero que esos cuatro o cinco valen por todos los amigos del mundo.
Dicen que el ser humano es el único que cae tres veces sobre la misma piedra, pero que si te caes te levantas.Que es bueno perdonar y olvidar, pero yo ni soy Dios ni tengo alzheimer, así que lo siento, pero eso no lo puedo hacer.
Dicen que la venganza no es buena pero...¿a quién no le gustaría vengarse de quién le hizo daño?
Que no es bueno mentir, pero esta vida es toda una mentira; que no hay nada ni nadie perfecto, pero que si lo son las modelos con un 90-60-90. 
Que el nunca más, nunca se cumple, y que el para siempre, siempre termina...
También dicen que las apariencias engañan, pero que las primeras impresiones son las que cuentan; que lo importante no es como se empieza, si no como se acaba,  pero que lo que bien empieza,bien acaba...

miércoles, 11 de enero de 2012

Poder disfrutar de los recuerdos de la vida es vivir dos veces.


 Las cosas no se olvidan, por muy dolorosas o felices que sean; sus recuerdos permanecen dormidos en nuestra memoria, sin aparecer y sin influir en nuestras vidas. Pero llega un momento en el que se despiertan, en el vuelven a atormentar, a recordarte lo bello que era todo, a quitarte tu sonrisa.
 Ha pasado demasiado tiempo, y tu recuerdo sigue aquí. El tuyo es el único que no está dormido, aún vive en mi mente, no quiere marcharse; no lo dejaré escapar.
 Tal vez alguien piense que se trata de amor, pero es más que eso. No se trata de un amor adolescente, de esos pasajeros, no; es algo más grande, más fuerte.
  La vida sería imposible si todo se recordarse, no podemos vivir constantemente ahogándonos en nuestros recuerdos, en el pasado, y menos aún si esos nos atormentan y hacen sufrir, el secreto está en saber elegir lo que debe olvidarse.

sábado, 7 de enero de 2012

Nada es lo que parece...


 Ya no queda nada de aquello. Esa pequeña herida que me hiciste ya está muy bien cicatrizada, no duele nada. De aquel fuego sólo quedan unas pocas brasas que ya ni queman. Me quedan un puñado de recuerdos, felices sí, pero son solo eso, recuerdos. Sufrí, o por lo menos eso creo.
 Ni siquiera sé si ahora te va todo bien, aunque por lo mal que se te ve, no creo. Fallaste demasiadas veces, y lo peor fue que no supiste rectificar.
 No me preocupa que te importase o no, sólo sé que a veces lo dudé mucho. Cambiaste, sí, porque yo a eso no lo llamaría madurar. Intentaste aparentar algo que no eras, o tal vez sí que lo eras.
 Sí, te fuiste de mi vida, aunque sé que yo también de la tuya. Una vez me dijeron que las personas van y vienen con las etapas de tu vida y que es absurdo desear tenerlas siempre a tu lado para toda la vida; que hay personas que son como una piedra cualquiera en tu camino.
 Es cierto que después de un ''¿Te acuerdas cuando...?'', no puedo evitar sonreír. Ahora siento que no sé ni que mierda siento; no sé si me das pena, no sé si creo que recibiste tu merecido, no sé si te recuerdo con nostalgia, no sé si extraño aquellos momentos, no lo sé.